A la convocatoria Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP), convocada para este jueves por Juan Camilo Mouriño, asistirán el Presidente, los gobernadores y el Jefe del Distrito Federal, así como el gabinete de seguridad del gobierno federal (los titulares de la Sedena, Marina, SSP, PGR y Cisen). Hay que resaltar algunos puntos cruciales de esta reunión:
* El tema principal de la reunión será cómo coordinar de manera efectiva a todos los cuerpos de seguridad que operan en el país en los tres ámbitos de gobierno. Así mismo, se analizará la reforma a las policías y la homologación de reglas para su capacitación, selección y evaluación. Se debatirá también sobre algunas propuestas presentadas para penalizar el secuestro y combatir la delincuencia organizada (entre ellas la del Presidente Felipe Calderón, la de Marcelo Ebrard, la de algunos grupos parlamentarios y organizaciones de la sociedad civil como México Unido contra la Delincuencia).
* Lo económico: Algunos gobernadores ya han anunciado la intención de solicitar al gobierno federal más recursos en el tema de seguridad pública. Sin embargo, cifras reportadas por CIDAC revelan que 75% de los recursos para el tema seguridad se destinan a delitos menores. Mientras que son 5% de los delincuentes los que generan el 60% de los delitos más graves como homicidio y secuestro. No es un tema entonces de más recursos sino de focalizar adecuadamente los que ya existen.
* Lo estratégico: El Secretario Técnico del CNSP será elegido en estos días y todos los partidos quieren controlar esta posición. Es necesario que este cargo no sea empleado para generar rentabilidades políticas, sino que sea visto como una plataforma desde la cual se pueden convocar acuerdos y generar políticas efectivas para el combate al crimen organizado.
* Lo político: La presencia de Felipe Calderón y Marcelo Ebrard en el mismo recinto se ha convertido en un pretexto para partidizar la crisis de seguridad nacional que vive el país y atrincherarse en posturas inamovibles. Sin embargo, esta reunión tiene que sentar el precedente para que ante verdaderos problemas de Estado, la urgencia, la cooperación y la responsabilidad prevalezcan sobre la retórica y el partidismo.
* Los pronósticos: Esta reunión debe rebasar las expectativas y no convertirse en un instrumento mediático para simular disposición al acuerdo y a la colaboración. Deben establecerse compromisos claros y precisos de cooperación por parte de los actores involucrados y no sólo anunciarse acuerdos retóricos y promesas legislativas. Para esto debe reconocerse la gravedad de la crisis de seguridad pública y la urgencia de un marco institucional con reglas claras y confiables. La transformación de las instituciones no será posible hasta que se reconozca que el problema de seguridad en el país no es de propuestas y diagnósticos sino político.
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