En cuanto a la selección de candidatos para los comicios intermedios cada partido ha seguido una estrategia diferente. Un intento fracasado de flexibilizar las reglas para selección de candidatos al interior del PAN se traducirá en candidatos de bajo perfil y con poca experiencia que no lograrán repuntar los pésimos resultados electorales que ha obtenido el partido en el último año bajo el mando de Germán Martínez. Por su parte, el PRD, bajo la dirección de Jesús Ortega, no logra reconciliar las divisiones entre la corriente de los chuchosy los amlistas para la selección de candidatos. Mientras tanto, el PRI se inclina por el pragmatismo que lo ha caracterizado –seleccionando candidatos según sus posibilidades de triunfo– y por la unidad del partido para llegar fuerte a los comicios. Los tres partidos apostarán a transitar sin conflicto la etapa de definición de las candidaturas contaminada por el involucramiento de liderazgos dentro del partido, así como de algunos gobernadores. Sin embargo, el PRI tiene casi asegurado el triunfo electoral ante un PAN y un PRD entrampados en divisiones internas.
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