El 12 de mayo, el grupo Reforma publicó una encuesta aplicada a 650 padres de familia con hijos cursando la educación primaria, secundaria o bachillerato. 77% con hijos estudiando en el sistema público de educación; 19% en el sistema privado y el 4% restante con hijos en ambos sistemas. En promedio, la mayoría consideró como buena o excelente la educación que reciben sus hijos, con notable diferencia entre sistema público, en el que 57% de los padres considera buena o excelente la calidad de la educación, y el privado, que satisface a 77% de los padres de familia. Así mismo, los padres perciben que los maestros tienen vocación y están bien preparados.
Los especialistas consideran que esta aprobación promedio de la calidad de los servicios educativos contrasta con los malos indicadores de desempeño de estudiantes (por ejemplo, la prueba ENLACE) y profesores, así como con la evidencia de diversos estudios y análisis académicos y gubernamentales, que coinciden en señalar que la educación en México es de mala calidad. Los especialistas consideran que esta inconsistencia podría deberse a que no se tienen mejores referentes en el contexto mexicano, el optimismo en la percepción de los padres, así como la tendencia a no ser exigentes con la calidad de los servicios públicos gratuitos. Sin embargo en el resultado final del proceso enseñanza-aprendizaje: la percepción de los padres sobre si sus hijos están bien educados los indicadores de satisfacción agregados y diferenciados por sistema público y privado se reducen.
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