Los legisladores aprobaron por una gran mayoría en agosto pasado el cambio al formato del Informe que:
a) Suprimió para el Presidente el requisito de acudir personalmente abriendo la posibilidad de presentar un Informe por escrito al Congreso e incorporó la “pregunta parlamentaria”
b) Instrumentó la comparecencia de los miembros del gabinete bajo protesta de decir verdad ante el llamado del Congreso.
Los primeros en estrenar el formato ante el Legislativo fueron los Secretarios de Gobernación y Seguridad Pública, y el titular de la PGR. Éste consiste en una sesión de preguntas y respuestas sin espacio para un discurso inicial por parte de los secretarios o posicionamientos políticos de los legisladores. Se dio a conocer hace una semana que serían 38 preguntas distribuidas de acuerdo al tamaño de las bancadas por partido: 8 son para el PAN, 7 para el PRD y el PRI, 4 para Convergencia y el PVEM, 3 para el PT y Nueva Alianza y 2 para el PSD.
Sin embargo, los legisladores dicen no estar satisfechos con este formato porque no fortalece la rendición de cuentas y favorece sólo al PAN al otorgarle el espacio para interpelar a sus propios funcionarios. Como siempre los legisladores terminan siendo detractores de una reforma que ellos mismos promovieron y aprobaron con grandes festejos. Ya se había comentado en este medio que el nuevo formato restaba proyección a la labor de gobierno ante la opinión pública y sobre todo no cumplía con el objetivo de comunicar a la población de manera eficaz el estado que guarda la administración pública federal.
La reproducción total de este contenido no está permitida sin autorización previa de CIDAC. Para su reproducción parcial se requiere agregar el link a la publicación en cidac.org. Todas las imágenes, gráficos y videos pueden retomarse con el crédito correspondiente, sin modificaciones y con un link a la publicación original en cidac.org
