El tono del Presidente Calderón en los últimos días hacía pensar que se preparaba para reencauzar su Gobierno y para hacer cambios de fondo en su equipo. Sin embargo, la salida de Eduardo Medina Mora de la PGR, Alberto Cárdenas de la SAGARPA y Jesús Reyes Heroles de PEMEX parece más una purga ideológica-partidista que una reorientación del gabinete. Asimismo, la propuesta desaparición de SECTUR, SFP y SRA, son cambios que permiten deshacerse de cuadros que no son cercanos al Presidente. Calderón decidió tener un gabinete sin Medina Mora y Reyes Heroles, considerados priistas, y fortalecer y proteger a los cercanos, Ernesto Cordero en la SEDESOL, Gerardo Ruiz en Economía y Genaro García Luna en SSPF, cuyo desempeño ha sido, en el mejor de los casos, cuestionable. En esta lógica, el reemplazo de Agustín Carstens en SHCP luce prácticamente inevitable en los próximos meses pero, por el momento, la renuncia más relevante es la de Medina Mora: por un lado su reemplazo es de bajo perfil, no es del total agrado de ninguna de las facciones del Senado y es muy cuestionado por su desempeño en Chihuahua, lo que abre paso a un proceso de ratificación difícil. Por el otro lado, Genaro García Luna, cercano al grupo de Los Pinos, ha conseguido por fin deshacerse de su gran rival y ahora tendrá que demostrar si su desempeño está a la altura de los nuevos reflectores que ahora se concentrarán en él.
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