El pasado 18 de marzo, el presidente Peña encabezó en Cosoleacaque, Veracruz, la conmemoración del LXXVI aniversario de la expropiación petrolera. A pesar de haber sido ambientada entre porras de los trabajadores de PEMEX a los altos funcionarios presentes –siendo las más estruendosas, curiosamente, las dirigidas a Carlos Romero Deschamps—, la ceremonia tuvo lugar en tiempos de incertidumbre para la industria petrolera. La euforia inicial por la promulgación de la reforma energética en diciembre de 2013, ha ido apagándose conforme permanecen las dudas respecto al contenido de su legislación reglamentaria. A esto se sumó el escándalo de corrupción contra uno de los contratistas más grandes de PEMEX, Oceanografía. Dicho hecho plantea una alerta de maremoto para muchos actores políticos, en particular dentro del Partido Acción Nacional, aliado clave en el tránsito de la apertura petrolera. Por lo pronto, mientras el gobierno federal mantiene el suspenso respecto a las leyes secundarias, el PAN amenaza con retrasar la discusión energética; la atracción de inversiones no encuentra el mejor de los escenarios.
Si bien el proceso de la reforma energética ya está en marcha desde finales del año anterior y sin necesidad de las leyes secundarias, no será posible tener una mínima certeza acerca de los eventuales beneficios de la apertura en el sector sin contar con reglas claras en el tablero. Ciertamente, el aparato transitorio de la reforma constitucional marca pasos a seguir y plazos a cumplir para la primera etapa de implementación. De esta forma transcurre la denominada Ronda Cero, aquella donde PEMEX tendrá la primera opción para ser considerada en la conservación de los proyectos de exploración y producción que la todavía paraestatal solicite (información que la empresa deberá entregar a la Secretaría de Energía (SENER) a más tardar este 20 de marzo). SENER, la encargada de las adjudicaciones en la industria petrolera según lo prescrito en la reforma, tendrá hasta septiembre de 2014 a fin de definir con cuáles proyectos se quedará PEMEX y cuáles serán sometidos a licitación. Los criterios para estas decisiones están por ser definidos, incluyendo los procedimientos y los responsables de sacar adelante esta etapa dentro de la SENER. La ley secundaria es el asunto clave.
Ahora bien, obviando una eventual falta de transparencia en la Ronda Cero –lo cual, de entrada, no sería una buena señal—, es indispensable que se definan de manera oportuna cómo serán los regímenes de contratos con inversionistas privados. En el artículo transitorio cuarto de la reforma se mandata al Congreso a establecer “las modalidades de las contraprestaciones que pagará el Estado a sus empresas productivas o a los particulares por virtud de las actividades de exploración y extracción”. El mismo ordenamiento indicaría que el plazo perentorio para materializar esto vence el próximo 19 de abril, 120 días naturales después de la publicación de la reforma. ¿Cumplirán los legisladores con esta obligación, o harán caso omiso impunemente como ocurrió con la reglamentación en materia de telecomunicaciones?
El debate de la reglamentación de la reforma energética ha traído consigo muchos más escollos de los esperados. Como era de esperarse, esta etapa se ha erigido como la más compleja del proceso y es donde han ido apareciendo los diversos intereses que pugnarán por extraer rentas del sector, por evitar ser víctimas de los escándalos de corrupción que vayan apareciendo (Oceanografía no es el primero, ni el último), y por posicionarse de la mejor forma en el contexto de la apertura, tanto en lo financiero, como en lo político. El gran espectro que continúa opacando la imagen de México es su rampante corrupción y el gobierno no ha dado señales contundentes sobre su intención de combatirla en serio. Ventilar casos emblemáticos, pero manteniendo la impunidad, genera perjuicios más ruidosos que el más sonoro de los aplausos. Tal vez en un afán de enviar un mensaje de intolerancia a la corrupción, en realidad se esté mandando indicios de que todo ha cambiado…para seguir igual.
La reproducción total de este contenido no está permitida sin autorización previa de CIDAC. Para su reproducción parcial se requiere agregar el link a la publicación en cidac.org. Todas las imágenes, gráficos y videos pueden retomarse con el crédito correspondiente, sin modificaciones y con un link a la publicación original en cidac.org