La polémica en el caso Banamex-Citigroup no cede y, por el contrario, ha abierto nuevamente el debate con posturas cada vez más antagónicas. Una vez más, un escollo legal ha obligado a la autoridad a proceder, como algunos acusan, “en contra del interés nacional”. Ante la coyuntura, la oposición no dejará pasar la oportunidad de generar ruido mediático buscando llevar el caso hasta la Suprema Corte, sin importar si la controversia resulta o no procedente. Sin embargo, los embates de la oposición no resultan del todo injustificados, sobre todo cuando Hacienda les ha otorgado espacio para hacerlo. El comunicado oficial de la SHCP a este respecto comete errores en materia de respaldo jurídico, sustento económico y escrutinio lógico:
* El comunicado avala a todos los bancos, cuando el TLC sólo respalda a aquellos cuyas casas matrices están en EE.UU. o Canadá. ¿Qué pasa entonces con los bancos europeos? El comunicado sencillamente obvia este punto.
* No queda claro por qué otorgar una gracia de 3 a 6 años para que los gobiernos extranjeros reduzcan su participación en el sistema financiero. Aquí incluso podría interpretarse que se quiere heredar el problema a la siguiente administración.
* Finalmente, la falta de agudeza política en el manejo y comunicación del tema abre un frente más para que la oposición busque golpear al gobierno federal y ganar terreno electoral. El error no está en el diagnóstico ni en la respuesta, sino en la forma de hacer públicas las medidas.
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