Este 5 de julio también habrá elecciones para elegir a 6 gobernadores (Campeche, Colima, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí y Sonora). Cuatro de estos estados están gobernados actualmente por el PRI y dos por el PAN. El estado más reñido es Nuevo León mientras que en otros el partido en el poder tiene una ventaja más cómoda. A diferencia de las encuestas que miden intención de voto en las elecciones federales, a nivel estatal se han observado irregularidades en la práctica de la opinión pública. En Colima, por ejemplo, dos de los principales diarios de la región publicaron las intenciones de voto para gobernador que se desprendían de la encuesta de Proyecta. Pero mientras que el Diario de Colima daba una ventaja de medio punto porcentual para el candidato del PRI, Ecos de la Costa le otorgaba a ese mismo partido una diferencia de casi siete puntos porcentuales a su favor. Las encuestas permiten conocer estimaciones bastante precisas sobre la competencia electoral. Con base en ellas, los políticos y los ciudadanos toman decisiones. Por ejemplo, un ciudadano que observe que, según las encuestas, su primera opción no tiene posibilidades de ganar puede decidir ejercer su voto por un candidato que sí las tenga. Por eso el ejercicio de las encuestas no es trivial y a nivel nacional e internacional existen asociaciones (como AMAI, WAPOR, AAPOR, etc.) que exigen de sus agremiados el cumplimiento de criterios mínimos de divulgación.
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